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Las integraciones con comercio electrónico pueden ser a veces complicadas. Pero en Lioren realizamos las integraciones de forma sencilla y te ayudamos con todo el proceso. Jumpseller no es la excepción. Quédate para enterarte de las ventajas de nuestra integración nativa entre Lioren y Jumpseller. ¡Comencemos!
Existen muchas opciones para el comercio electrónico, algunas populares y más sencillas. Otras con opciones casi ilimitadas, y todas son buenas dependiendo de lo que quieras para tu negocio. WooCommerce es una herramienta muy útil para armar tu comercio, y en Lioren tenemos una integración nativa y sencilla para que puedas utilizarla en todo su potencial. Acompáñanos a conocer la integración nativa de Lioren con WooCommerce.
Continua leyendo “Integración nativa Lioren: WooCommerce”La integración con comercio electrónico es una realidad muy presente actualmente, por lo tanto, es importante que puedas realizarlo de manera sencilla, sin problemas, y contando siempre con nuestra ayuda. En Lioren estas integraciones vienen de forma nativa y por esto queremos destacarlas este mes, partiendo con una favorita: Shopify. Quédate para averiguar más sobre este módulo y sus ventajas. ¡Empecemos!
La salud mental es algo sumamente importante, y un asunto que de vez en cuando dejamos de lado por distintos motivos. Conductas pequeñas, como evitar comer o arreglarse, para mantener nuestros trabajos, son muchas veces más dañinas de las que aparentan. Esta semana queremos recordarte la importancia de cuidar de tí, y ayudarte a que te sientas más sano. ¿Empezamos?
En Chile, la salud mental es un negocio muy costoso, además de ser difícil de encontrar y de aceptar para uno mismo. Las sesiones que uno necesita con un psicólogo, suelen ser muchas, e ir de la mano de tratamientos que aumentan los costos. Aunque en la salud pública encontramos asistencia y psicólogos que pueden recibirnos, es un sistema que comúnmente está abarrotado, y conseguir sesiones de manera frecuente para mantener un correcto control de la situación se vuelve muy complicado.
Es posible que de vez en cuando te hayas sentido agotado, insuficiente o deprimido. Te encuentras preguntándote “¿qué estoy haciendo?” o “¿lo estoy haciendo bien?”. Puede que el motivo sea simple ansiedad, o puede que estés teniendo conductas más autodestructivas. Y el problema es que estas conductas van a afectar frecuentemente en nuestro desempeño laboral. La frecuente inseguridad y el anteponer demasiado el trabajo, terminan por tener costos muy altos.
Comencemos abordando a nivel personal. Es muy común ver a nuestros colegas, amigos o incluso familiares desganados, siempre cansados, y probablemente escuchaste alguna vez la frase de “es que yo trabajo por su bien”. En base a eso probablemente llegaste a pensar que trabajar es lo único que te dará una verdadera satisfacción. Pero está bastante alejado de la realidad. Es cierto que cuando nos felicitan, cuando terminamos un trabajo antes de la fecha de entrega, o cuando evalúan nuestro trabajo de forma positiva, sentimos cierto regocijo, pero no por esto debemos descuidar nuestra salud. En mi caso personal, se me hacía frecuente escuchar a mi madre decir: “No tuve tiempo de almorzar, por terminar tal entrega”, y esta situación se repetía día a día, trayendo consigo problemas graves en su salud física. A eso debemos sumar la constante ansiedad que se siente al no entregar algo en el plazo establecido. Ojo, plazo que en muchas oportunidades nosotros mismos nos colocamos encima.
Con la pandemia podemos sumar a esto la falta de apoyo físico o interacción. El teletrabajo trae consigo cosas buenas y malas, y una de esas malas, es la falta social con los compañeros de trabajo. Las habilidades sociales son parte fundamental de la vida humana, y restringir su expresión puede llegar a causar inseguridad y daño psicológico.
El entorno de trabajo puede verse afectado de igual manera. La ansiedad que sentimos, o la fatiga puede afectar de distintas formas. Por ejemplo, al sentir ansiedad por un encargo somos más propensos a cometer errores en la tarea que se nos ha asignado, lo que nos retrasa y genera más ansiedad. Nos sumimos en un círculo vicioso en donde la tarea que se nos asignó se vuelve una pesadilla para nosotros. Pero no es solo este caso. Si nos sentimos realmente desganados en nuestro entorno de trabajo, por la razón que sea, no avanzaremos en nuestros encargos, dejándolo para última hora, lo que puede afectar a nuestros compañeros. Nuestra conducta puede afectar en el trato que ofrecemos a nuestros clientes e impactar los ingresos del negocio.
Tampoco es la idea dejarse pasar por alto. Es cierto que de vez en cuando nos encontraremos con clientes que quieran pasarse de listos, o incluso que sean altaneros o maleducados sin ninguna razón aparente. Es importante recibir un respaldo adecuado por nuestros compañeros y jefes en estas ocasiones y saber diferenciar cuando es un accidente ocasionado por el trabajador o por el cliente.
Hay muchas causas, dentro de nuestro entorno de trabajo, que pueden afectar nuestra salud mental, pero también es muy importante identificar las causas personales que pueden afectarnos de distintas maneras. Debemos ser completamente honestos y responsables con nosotros mismos.
Dentro de los principales factores de riesgo podemos encontrarnos con:
El estado de ánimo puede afectar notablemente los resultados laborales, y por esta razón es indispensable un buen ambiente laboral, ya que esto influirá directamente en la productividad de las personas.
Nuestros empleadores deben ofrecer espacios seguros para ejercer nuestras funciones. Proporcionar equipamiento y apoyo. Promover la salud mental puede ayudar a aumentar la productividad y al mismo tiempo mejorar la calidad de vida de sus trabajadores.
Si tomamos como ejemplo a ciertos países de Asia, podemos encontrar una glorificación del trabajo, donde los empleados deben poner primero sus obligaciones laborales, con horarios extensos y poco flexibles para recreación, lo que ha aumentado los índices de suicidio.
Claramente, no todo es siempre culpa de la empresa. Nosotros debemos ser capaces de levantarnos y solicitar la ayuda que necesitamos.
Hablar con los compañeros de trabajo acerca de tus preocupaciones es una buena idea, y puedes recibir más apoyo del que esperas. Si no te sientes seguro haciéndolo, toma tu tiempo libre como un momento de recreación para ti. Respeta tus horarios para comer y aprovéchalos para hacer algo fuera del trabajo, como leer un poco o pasear unos minutos. Si estás realizando teletrabajo, aléjate del monitor por unos minutos. No olvidemos que las sesiones prolongadas a la luz artificial de los computadores afecta en la producción de melatonina en nuestros cuerpos, lo que produce problemas para dormir. Tómate unos minutos para limpiar y organizar tu espacio de trabajo, haz que estar ahí sea un momento agradable, no un castigo.
Finalmente, si te encuentras con la necesidad de recibir atención psicológica constante, ajusta tus horarios, haz una lista de tus tareas y busca ayuda para organizarte. Si debes asistir a control, avisa con anticipación. Debes ser completamente honesto contigo mismo, y aceptar que necesitas ayuda es el primer paso para estar mejor.
Recuerda que tienes gente apoyándote, y que siempre hay alguien en una situación como la tuya. No temas pedir ayuda, para seguir avanzando hacia un mejor futuro para ti mismo. Te envíamos un abrazo, y mucho apoyo desde aquí.