Imagina que tienes una pyme en crecimiento, pero aún opera sin formalizar el negocio. Al principio, esto puede parecer sencillo: no hay tanta burocracia ni impuestos que pagar. Sin embargo, con la reciente implementación de la Ley Antievasión en Chile, esta informalidad puede convertirse en un riesgo serio para tu negocio.
Formalizar tu negocio ante el SII no solo te permite operar legalmente, sino que también te protege de posibles sanciones en este nuevo escenario regulatorio. Además, la formalización abre las puertas a obtener financiamiento, clientes empresariales y una reputación de transparencia que impulsa el crecimiento. En este artículo, te explicaremos por qué iniciar actividades es un requisito fundamental para cualquier emprendimiento y cómo realizar el proceso de manera sencilla y rápida. ¡Comencémos!
¿Por qué formalizar mi negocio?
Realizar la iniciación de actividades es fundamental para que una pyme en Chile opere formalmente y cumpla con sus obligaciones tributarias ante el Servicio de Impuestos Internos (SII). Este registro permite a tu empresa, emitir documentos tributarios como boletas y facturas, pagar impuestos, y también, acceder a financiamiento bancario y programas de apoyo estatales, lo cual es crucial para su crecimiento. Además, muchas empresas y organismos exigen trabajar con proveedores formalizados, por lo que iniciar actividades es necesario para construir relaciones comerciales estables y aprovechar oportunidades de negocio, como licitaciones públicas.
Además de proyectar una imagen de seriedad y compromiso, la iniciación de actividades permite a la pyme evitar sanciones legales por operar en la informalidad, ya que el SII impone fuertes penalizaciones a negocios no registrados. En resumen, iniciar actividades ayuda a una pyme a operar en el mercado con confianza, acceder a beneficios financieros, y cumplir con la normativa, asegurando su sostenibilidad y competitividad.
Ley Antievasión:
La nueva Ley Antievasión, vigente en Chile desde octubre de 2024, establece que los bancos deben informar al SII sobre las personas o empresas que reciban 50 transferencias o más, provenientes de personas distintas, en un mismo día, semana o mes. Esta información será entregada al SII de manera semestral, con el objetivo de detectar posibles actividades económicas informales y reducir la evasión fiscal.
En este contexto, la formalización de un negocio mediante la iniciación de actividades es esencial para las pymes. Al estar registradas ante el SII, las pymes pueden operar legalmente y cumplir con las exigencias de esta ley, evitando riesgos de sanciones o investigaciones por aparentes actividades irregulares. La formalización permite a una pyme demostrar el origen lícito y declarado de sus ingresos, lo que además le da acceso a beneficios adicionales, como la emisión de documentos tributarios oficiales y la posibilidad de participar en cadenas de valor de manera transparente.
Para una pyme que ha realizado su iniciación de actividades, esto implica que debe cumplir con los nuevos requisitos de la ley, ya que al estar registrada ante el SII, es más fácil que las autoridades verifiquen el origen de sus ingresos y la trazabilidad de sus operaciones.
Trámite Simplificado:
El proceso de formalización de tu empresa se divide en varios pasos, en donde realizar el Inicio de Actividades es uno de ellos. Partamos por realizar el registro de la empresa. Los pasos son los siguientes:
- Definir el tipo de empresa o sociedad.
- Crear o constituir legalmente la empresa.
- Publicarla en el Diario Oficial.
- Registrarla.
- Obtener RUT y declarar Inicio de Actividades.
- Obtener los permisos necesarios para operar.
- Pasos finales.
Hacer la distinción entre persona natural y persona jurídica es un factor importante. Esto radica principalmente en la diferencia económica. La persona natural puede establecer un negocio o una sociedad comercial sin necesidad de socios, esto implica que puedes llegar a comprometer tu patrimonio personal en la gestión y los resultados. Por otra parte, la persona jurídica permite a distintas personas conformar una sociedad para manejar dicho negocio, sin tener que comprometer su patrimonio personal.
También varían los tipos de sociedades. Si eres una persona natural, entonces tu negocio caerá en la modalidad de microempresa Familiar. Para las personas jurídicas, las opciones son más amplias:
- Sociedad de Responsabilidad Limitada (SRL)
- Sociedad Anónima, que puede ser abierta o cerrada.
- Empresa individual de Responsabilidad Limitada (EIRL)
- Sociedad Comanditaria o in Comandita
- Sociedad Colectiva Comercial
A partir de aquí existen dos sistemas para hacer el correcto registro de nuestro negocio. El primero es el registro simplificado utilizando la web www.tuempresaenundia.cl. Aquí es posible crear y registrar en línea tu emprendimiento de forma rápida y simplificada. Tenemos otra nota acerca de esta plataforma, y te dejaremos el enlace si quieres más información.
La segunda manera es a través de una notaría. Para este proceso es necesario realizar varios trámites, y que así la empresa quede registrada y puedas obtener un RUT. Los pasos son los siguientes:
Crear o constituir la empresa mediante escritura pública.
- Publicar la Constitución en el Diario Oficial.
- Inscribir tu empresa en el Registro de Comercio
- Obtener el RUT en el Servicio de Impuestos Internos
Bien, ahora ¿cómo realizamos el Inicio de Actividades?
Independiente de la modalidad que hayamos utilizado para constituir tu empresa, es necesario realizar la Declaración Jurada sobre el Inicio de Actividades ante el SII. Es un trámite sin costo, y se realiza en las oficinas del SII, según el domicilio de la empresa. También puede realizarse en línea desde la página del SII.
Para realizar el trámite electrónico es necesario que tengas el RUT asignado a tu empresa, haber seleccionado el código de actividad, saber si es afecto a IVA o no, tener la dirección y el rol municipal del negocio, y finalmente el correo electrónico y el teléfono de contacto.
Con estos datos el trámite se realiza a través de www.sii.cl, ingresando al apartado “Mi SII” e iniciando sesión. Te pedirá los datos como contribuyente, es decir, el RUT y la clave del dueño o representante legal de la empresa.
Luego nos vamos al apartado “Servicios On Line” e ingresamos a “RUT e Inicio de Actividades”, dando click en “Inicio de Actividades”.
Trámite Tradicional:
Para realizar el trámite de forma presencial, es necesario ir a una oficina y presentar la siguiente documentación:
- Formulario 4415 del SII
- Cédula de Identidad del representante legal y de quién realiza el trámite, en caso de personas jurídicas, junto al poder notarial que da la autorización.
- Escritura de constitución de la empresa protocolizada ante notario. En el caso de las Sociedades Anónimas, Limitadas y Empresa Individual de Responsabilidad Limitada, se debe indicar el Código de verificación Electrónica.
- Acreditar domicilio, para lo cual debes presentar los documentos necesarios como el rol de avalúo de la propiedad.
Con estos pasos completados, es necesario obtener la patente municipal y algunos otros permisos, pero su empresa estará formalizada.
Una vez constituida la empresa e iniciado el trámite de actividades en el Servicio de Impuestos Internos (SII), solicita la patente en la municipalidad correspondiente al domicilio comercial de tu negocio. La patente permite operar legalmente en una comuna y varía en costo según el capital inicial y el rubro del negocio.
Dependiendo del tipo de actividad y ubicación, podrías necesitar permisos específicos, como el Certificado de Zonificación Municipal (que verifica el uso del suelo), y la Autorización Sanitaria (requerida para negocios de alimentos o producción de bienes), gestionada por la SEREMI de Salud. Cada permiso tiene requisitos particulares según la municipalidad y el rubro.
Toda esta información, y mucho más, puede encontrarla en la Guía para Formalizar tu Emprendimiento del Ministerio de Economía, Fomento y Turismo, en la página www.quieroemprender.cl. Te recomendamos darte una vuelta y revisar los puntos más interesantes para que tu negocio no se quede atrás, y no arriesgues a multas o problemas por una mala gestión.
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